Implementación de la Agenda Urbana Rumbo al 2030 (Virtual)

Introducción y Networking. Se presentan las principales agendas internacionales, así como los compromisos hacia el 2030, resaltando la urgencia y los retos para su cumplimiento en los próximos 10 años.

Si bien el futuro global tiene que ver con las ciudades, inadecuado será no entender la condición territorial en que están inmersas. El territorio, entendido como un sistema operativo, como un ecosistema, es hoy la principal plataforma de actuación para entender y atender los retos de las ciudades. En este módulo se revisará la escala territorial de manera integral vinculando la directamente con la sostenibilidad ambiental y social y se compartirán herramientas para la elaboración de diagnósticos multidimensionales.

La dimensión económico-productiva condiciona las principales dinámicas de las ciudades, y sus efectos explican la configuración del territorio más allá de sus límites, llegando a tener un espectro de influencia de escala global. La regulación del suelo y la oferta de la vivienda son elementos para clave para consolidar ciudades ordenadas y sostenibles, con un adecuado aprovechamiento de los recuros y el desarrollo de oportunidades de una forma equitativa.

La Nueva Agenda Urbana busca que los grandes objetivos se puedan convertir en planes y proyectos concretos, asume que la planeación debe ser un aliado en la búsqueda de mejorar las condiciones de nuestras ciudades. La planeación puede ser la ruta corta para erradicar algunos de los más grandes problemas que enfrentamos a través entre otros, de un diseño urbano adecuado. En este módulo se recorren los principales elementos que componen el espacio urbano, público y privado, así como sus condiciones ideales para resolverlo. La vivienda, el espacio público, así como el concepto de resiliencia, son temas troncales de este módulo.

Como escenario de encuentro, la ciudad es también escenario de conflicto. Las formas de organización social han generado estructuras de poder y marcos institucionales para la gestión de los recursos comunes, que se encuentran permanentemente influidas por intereses y proyectos de distinta naturaleza y escala. Los mecanismos para construir acuerdos y participar en las decisiones que nos afectan están en la base de la búsqueda por modelos de gobernanza para una nueva forma de entender las ciudades.

El papel del sector público en la implementación de la nueva agenda urbana es fundamental por sus capacidades para movilizar, orientar, y regular las inversiones y acciones urbanísticas hacia un desarrollo equilibrado. La correcta aplicación de políticas e instrumentos normativos, financieros, fiscales y políticos que tienen en sus manos los gobiernos locales son determinantes en la búsqueda por garantizar modos de vida digna y sustentable en las ciudades.

La efectiva materialización de los principios de la NAU en el territorio dependen de buenas prácticas en el diseño, desarrollo y operación de proyectos, programas y plataformas de gestión en el territorio, además de un adecuado sistema de monitoreo y evaluación sobre su desempeño.